26/09/2023
Emprende un negocio sin un equipo de trabajo

Estamos en una época donde hay muchas facilidades para iniciar un nuevo negocio desde cero. Construir algo incluso desde el salón de tu casa y sin mover un dedo es algo muy común, por lo que te vendría bien aprovecharlo y subirte a esta nueva ola.

Gracias al apoyo de las nuevas tecnologías, es mucho más sencillo emprender. Pero si sientes que necesitas recursos indispensables o un equipo completo de trabajo para comenzar, permítenos decirte que no es así: puedes empezar a emprender desde cero, sin contar con el respaldo de un grupo de colaboradores.

En este post, despejamos la duda de si se puede (o no) emprender un negocio sin un equipo, los pasos que puedes realizar para comenzar y algunas ideas que pueden venirte bien para darle pie a tu emprendimiento. ¡Comencemos!

¿Es posible emprender un negocio sin un equipo?

Al momento de decidir emprender un negocio, son muchas las dudas que puedas tener al respecto:

- ¿Podré hacerlo?

- ¿Tendré los medios necesarios?

- ¿Necesito contar con un equipo de trabajo para empezar?

Lo primero que debes saber al respecto es que cualquier negocio que decidas emprender puede ser realidad, con constancia, disciplina y dedicación. El resto vendrá con el tiempo, si sabes mantener tus ojos en la meta que deseas alcanzar.

No te vamos a mentir: tener un equipo de trabajo siempre viene bien, pero no es imprescindible para empezar. Si consigues consolidar tu propio emprendimiento y deseas disponer después de un equipo de trabajo mayor, bienvenido sea. Pero en este post te daremos las herramientas para comenzar sin necesidad de ello.

Incluso, en muchas ocasiones, esperar a tener los recursos para comenzar o un grupo de trabajo consolidado sólo servirá para que el proyecto se retrase, dilatando aún más tu gran objetivo. Así que, resuelta esta duda, ¡veamos la mejor forma de comenzar tu negocio!

¿Cómo comenzar un negocio sin un equipo de trabajo?

¿Has decidido emprender tu vuelo en solitario? Perfecto, entonces veamos la mejor forma de administrar un negocio sin necesidad de contar con un grupo de trabajo.

Para ello, te dejamos algunas indicaciones que puedes seguir para comenzar con buen pie tu negocio:

1. Abarca el tiempo que tengas disponible

Puedes tener ganas de comenzar ya a emprender tu negocio, pero eso no significa echar todo lo demás por la borda. Puedes adecuar tu nuevo emprendimiento con tu ocupaciones actuales y adecuarlas a tus compromisos actuales.

¿Qué después quieres dedicarte de lleno a tu negocio? Por supuesto que sí, ese es el camino. Sin embargo, puedes comenzar un emprendimiento que puedas realizar paralelamente a tus labores cotidianas.

No te preocupes, ya hablaremos de algunas ideas de negocio que te pueden resultar. por ahora, vamos hacia el punto número 2.

2. Identifica tu idea de negocio

¿Quieres comenzar algo, pero no sabes qué puedes hacer? Esta duda es la principal barrera que debes saltar para comenzar (y consolidar) tu futuro negocio. Básicamente, lo que necesitas es una buena idea para arrancar.

Para identificar aquello con lo que puedes comenzar tu negocio, plantéate las siguientes preguntas:

- ¿En qué eres bueno?: revisa lo que te gusta hacer en tu tiempo libre, evalúa los posibles productos que puedas vender, relacionados con los hobbies que tengas. Es decir, busca la manera de explotar tus intereses.

- Investiga productos que ya existen: haz una investigación exhaustiva sobre posibles brechas en el mercado, que puedas aprovechar para responder a la necesidad de tu público objetivo.

- Capitaliza las tendencias: si ves que hay un producto que esté apareciendo en todas partes o sientes que tienes una idea genial para sacar el máximo provecho de un producto, puedes iniciar una gran propuesta de negocio.

3. Valida tu propuesta

Es muy común que mucha gente piense en entrar en un negocio, dedicando dinero y tiempo, sin saber si su producto va a ser rentable a mediano y largo plazo. No cometas este error e investiga bien primero.

Algunas formas en las que puedes validar tu propuesta de negocio pueden ser las siguientes:

- Crea una versión beta de lo que es tu producto o servicio.

- Desarrolla una tienda que tome pedidos por adelantado.

- Comienza una campaña de crowdfunding.

Una vez estés claro de que cuentas con un producto válido para vender, entonces puedes empezar a formar tu negocio.

4. Busca un nombre comercial y diseña tu plan de negocios

Ya le estás dando forma a tu negocio, ahora debes pensar en un nombre acorde al producto y/o servicio que vas a ofrecer. Busca un nombre corto, fácil de recordar y que encaje dentro de lo que realizas.

Eso sí: evita los nombres similares. Busca destacar por encima del resto y, además, revisa que ninguno de tus competidores esté utilizando el nombre que piensas para tu negocio.

También debes diseñar un plan de negocios para que puedas comenzar a crear todo lo que es tu propuesta de negocio, ya que te servirá de guía para todo lo que será la estructura de tu emprendimiento.

5. Evalúa tus conocimientos de finanzas

La rentabilidad es algo muy importante de todo negocio. Si un negocio no es rentable, sería extraño que decidieras comenzar con él, por lo que debes asegurarte de que el negocio que empezarás te permita generar ingresos.

Para que esto ocurra, debes tener ciertos conceptos básicos de finanzas y, así, serás consciente de la inversión total que requerirá tu negocio y de los posibles gastos que puedas tener.

No descuides la contabilidad de tu negocio. Prepárate y edúcate bien al respecto, lo que podrás hacer de la mano de nuestro Programa de Educación Financiera.

6. Comienza a desarrollar tu producto

Ahora, manos a la obra. Si ya comprobaste la rentabilidad de tu producto, es momento de diseñar el producto o servicio que quisieras ofrecer.

Para ello, puedes adoptar una de estas perspectivas:

- Crea tu propio producto.

- Personaliza un artículo que ya exista.

- Elabora una selección de productos.

7. Planifica una estructura empresarial

Aunque este post trate de emprender sin necesidad de un equipo de trabajo, necesitas diseñar una estructura empresarial antes de lanzar tu negocio.

Puedes optar por los dos tipos más comunes que son los que te describimos a continuación:

- Empresa unipersonal: este es el modelo que seguiremos en este post, ya que eres la única persona involucrada dentro del negocio (incluso aunque después decidas contratar empleados). Eres el principal responsable del emprendimiento y sus actividades.

- Estructura de corporación: estarán varios propietarios involucrados dentro del negocio y, directamente, no serás el responsable directo del mismo. Eso sí, hay mucho más papeleo y es más complicado empezar.

8. Piensa en licencias, softwares y ubicación

Para evitar cualquier clase de problemas legales, averigua bien el tema de las licencias en tu país. Recuerda que tu emprendimiento se rige mediante unas leyes y regulaciones que debes seguir, así que evita cualquier problema y asesórate bien.

Otro punto que debes manejar es el tema de los softwares que usarás para administrar tu negocio. Si los configuras de buena forma, podrás manejar tu negocio sin requerir mucho esfuerzo.

Algunos de los programas que puedas necesitar están relacionados con los siguientes campos:

- Contabilidad.

- Email marketing.

- Gestión de proyectos.

- Marketing.

- Tienda online.

Y finalmente, debes considerar todo el tema de dónde estará ubicado tu negocio. ¿Necesitarás un espacio o podrás hacerlo todo de forma virtual? ¿Cómo será el sistema de empaque y distribución de los artículos? Son preguntas que debes considerar en este punto.

9. Aprende nociones básicas de diseño y fotografía

Como tú serás el que estará encargado de todo el apartado necesario, necesitas manejar ciertos conocimientos extra. Especialmente en el tema de la presentación de tu producto a tus clientes.

Manejar nociones básicas sobre el diseño te servirá para diseñar tu logotipo o elegir los colores de tu marca. Incluso para saber cómo diseñar tu página web o blog, te vendría de maravillas este conocimiento.

También saber de fotografía puede darte una ventaja competitiva para promocionar tus artículos. Y conocer de marketing te será muy útil para que tu negocio tenga éxito y llegue hacia tus clientes potenciales.

Con estas indicaciones básicas, tendrás una base para comenzar tu negocio. Eso sí, lo más importante para iniciar tu emprendimiento es que te informes bien acerca de todo lo que puede necesitar tu negocio y... ¡manos a la obra!

Ideas para emprender un negocio sin un equipo de trabajo

No podemos cerrar este post sin darte alguna luz sobre algunas actividades que puedas realizar para emprender en solitario. Como verás, encontrarás emprendimientos en los que podrás seguir a cabalidad los pasos mencionados anteriormente y otros en los que podrás ser más flexible con el método.

Algunos de los emprendimientos que puedes empezar sin un equipo de trabajo son los siguientes:

- Diseño y venta de cerámica y joyas: el que mejor se puede apegar al plan descrito antes. Muchos profesionales han creado sus e-commerce y han conseguido establecer su emprendimiento digital.

- Experto en marketing online: un negocio que requiere preparación de tu parte pero, si consigues especializarte, tus servicios serán muy demandados por las empresas.

- Escribir en blogs: puedes decidir empezar tu propio blog personal, en el que escribas con la intención de promocionar tus conocimientos de redacción. O también puedes optar por escribir en plataformas blogging, como Medium.

- Crear un podcast: uno de los negocios que más está en boga actualmente. Con la creación de un podcast, podrás ganar dinero generando contenido, gracias a patrocinantes y a la colaboración de tu público (claro, si es un contenido de calidad).

- Personal shopper: en este caso, este servicio es muy demandado en la actualidad. Si tienes buen ojo para la elección de ropa, puedes promocionar tu servicio hacia clientes que no les guste comprar o no tengan el tiempo necesario para ello.

Hay cientos de negocios que puedes emprender, sin necesidad de contar con un equipo de trabajo. Todo depende de ti y de lo que sepas hacer... y, por supuesto, de hacia dónde quieras llegar.

No te limites a empezar algo sólo porque no dispones del apoyo suficiente. Si tienes una aspiración, puedes emprender y crear algo desde cero que, con dedicación y constancia, crecerá hasta convertirse en lo que siempre soñaste. ¡Comienza con dar el primer paso!